¡Oh Jorge, niño mío!
de cabellos dorados
de cabellos dorados
cómo el sol del estio....
y ojos verdes de mar!....
¿Quien nos rompió la vida?
¿Qué, nos hirió a la par,.
que tan solos estuvímos
cuanto tanto amor sentímos?
¿Que paso, desde áquel día,
que tu mano golpeo el cristal de la puerta del salón
y en tus dedos casi rotos,
la sangre empezó a brotar?
No solo te heriste tú.
¿Sabes, mi niño querido?....
Desde entonces...
nada volvió a ser igual...
tú ya no fuistes el mismo.
Tuviste un mal despertar.
Ya no me oprime tanto el dolor de tu ausencia.
Mas sí la falta de tantas presencias...
en nuestras vidas: desgajadas, rotas....
Nuestro sino, fueron la soledad, el silencio el miedo
y la infinita tristeza....
Entre idas y venidas, recaidas, despedidas...
transcurrieron nuestras vidas, como rios
que van a parar al mar...
Siempre solos....Solos siempre....
Separados , ignorados....
Tú en tu isla, yo en la mía.
Llorando a mares los dos,
sin que nadie lo supiera,
exceptuando tú y yo.
Caminamos juntos, sí,
por caminos a la par,
pero entre si, diferentes...,
Mas tu camino te hizo,
encontrarte con tu muerte,
Y yo en el mío, aunque vivo,
vivo sin vivir en mi,`porque en vida,
vivo muerta, porque no estás junto a mi.
Ahora, te tengo mas cerca,
aunque mas lejos estás,
porque he aprendido a entender,
que la soledad nos une
y no queda ya lugar,
para sufrir o llorar,
pues sé, que ya estás en paz,
con los tuyos.., los de aquí,
y con los del mas.... allá...
¡Oh, Jorge, niño querido,
¿Por qué callaste mi bien?
¿Por qué te fuiste a galope
de enemigo tan cruel?
Te ofrezco hoy mi sonrisa,
el consuelo de mis brazos
nada mas tengo, ¡mi vida!
Solo un humilde retazo ,
de un poema mal trazado
que salió del corazón,
y que ni siquiera rima.
Tu madre, que jamás deja de pensar en ti. Maribel
Jorge con su madre
MARIBEL, la persona te entiendo perfectamente no es fácil ser madre y ponerse en el lugar de tu hijo.. comprender... los sentimientos, los miedos están dificil de hacer ver las cosas.. que nos hacen daño, siento todo lo que has sufrido,,sé que eres una persona maravillosa que solo quiso lo mejor para su hijo.
ResponderEliminarPero nada es fácil para una mente complicada que buscaba muchas respuestas y no las encontraba.
Porque como decia mi padre: No analices ni profundices sino te darán las piedras en las narices.
simplemente decirte que tu rostro refleja todo el dolor que has vivido y lo que has amado.
Un abrazo sincero como siempre de Carrachina.
Y el poema no hace falta que rima llega directo al corazón y es de una entrega total.
Dos islas que se mirán y poco a poco llegan a reconocerse.
Un beso
Mensaje para Carrachina
ResponderEliminarEfectivamente Carachina, no fué nada fácil, entender a Jorge, y mucho menos ponerme en su lugar, aunque lo intenté por todos los medios.
Te agradezco mucho tus amables palabras y la valoración que haces de mi hijo.
Ya ves, de una madre muy normalita, nació , un personaje como Jorge, que despues de haberse ido, esta cosechando tanto éxito , de lo cual me siento muy orgullosa y agradecida. Para mí, desde luego un genio, un artista nato, que para eso estaba destinado, antes ya de nacer, y que de su sufrimiento surgió todo ese caudal de sentimientos, que tanto enganchan y cautivan. Fué un ser nacido para crear.
Pero hay algo muy sutil que quiero añadir, y es que Jorge no solo sufrio él por ser como era, y por elegir un camino que le llevo a la muerte,. Solo quiero aclarar algo, para que nadie se equivoque o juzgue a la familia por su dolor. El dolor se lo busca uno, y eligió la droga, que es sinonimo de muerte y autodestrucción, y MUCHO DOLOR.
Lo que nunca entenderé, es que como siendo tan inteligente, no pudo parar a tiempo su adicción. En alguno de sus escritos decía que la droga le inspiraba.
Le dimos toda la ayuda que a un ser humano se le puede dar y maxime siendo tu hijo a quien adoras. Jorge nos hizo sufrir mucho, y no quiero comparar su dolor con el mío, pero fué muy duro verle como se destrozaba la vida cada día a pesar de los intentos que hicimos para que saliera de su propio infierno.
De nuevo darte las gracias por ser la única que en este blog ha dicho algo amable sobre su madre.
Mi cariño incondicional-
Maribel
asi lo siento Maribel, soy madre y mis niños son pequeños, pero la sensibilidad mal canalizada puede acabar asi, también el arte en todos sus sentidos hace en cierto modo sufrir, porque tienes la necesidad de aprobación y amor que a veces el mundo no te da. Pero si comprendemos que en la familia está el mayor tesoro, entonces no necesitamos mucho más.
ResponderEliminarYo me pongo en tu lugar y se te ve una madre que ha sufrido lo indecible,, y eso no se lo deseo a nadie.
Te mando mi cariño y mi respeto.
En nosotros esta la elección de los caminos que queremos recorrer.
Gracias a ti por este mensaje tan sincero que me ha emocionado.
un abrazo de Carrachina.
Querida Carrachina: Puedo deducir por tu carta que eres una persona joven al comentarme que tienes tus hijos todavía pequeños. Me da cierta envidia que puedas tener la oportunidad maravillosa de poderles dar una buena educación y tratar por todos los medios que no caigan en los infinitos peligros que parecen estar amenazando cada vez con mas fuerza a esta sociedad tan permisiva y escasa de valores. Jorge fué un buscador de sueños desde muy pequeño. Era ya un niño muy especial, a quien no pude controlar, porque se me fué de las manos. Le encantaba estar casi siempre con personas mayores.
ResponderEliminarCuando uno es joven a veces no sabes percibir el potencial que puede llegar a tener un hijo. Tienen que pasar cosas para que mucho despues te des cuenta.
Un consejo: No descuides jamás el cuidado de tus hijos. Son regalos preciosos que Dios nos hace, para que vayamos moldeandolos mientras esten en nuestras manos. Son tesoros de una valía que ni siquiera podemos llegar a imaginar.
Nadie es perfecto Carrachina. Todos intentamos hacer las cosas lo mejor que podemos, pero a veces la vida te depara sorpresas, y no siempre son buenas. Pero hay está la clave para los que vienen detras de los que hemos errado.
Ha sido preciso que Jorge se marchase de esa manera, para hacer caer en la cuenta de muchos, que hay que andar con mucho cuidado y prestar mucha atención a los hijos sin descuidar ni el mas mínimo detalle. Con tristeza por su perdida, pero también con alegría tengo que decir que he aprendido muchas cosas buenas para mi vida. He crecido humanamente y espiritualmente mucho con todo lo que viví, sufrí y soporte, pero mereció la pena aunque la vida ya no me pueda devolver a mi hijo. Pero lo maravilloso de todo esto, es que Jorge continua a mi lado ya de otra forma, que no se puede explicar con simples palabras. Es mi fuente de inspiración, es mi soporte en los bajos momentos, y me impulsa a tener ilusión por este mundo en que vivímos, porque hay mucha mas gente maravillosa y buena que todo lo contrario.
ResponderEliminarGracias por tus palabras, gracias por entenderme un poco, porque esto me anima a seguir mi camino con mucha esperanza.
Un abrazo Cacharrina para ti de todo corazón.
Maribel... una frase que decia mi padre,, que era un ser super especial lleno de sensibilidad y amor a sus hijas...
ResponderEliminarPensad siempre que hay más gente buena que mala.
La frase que tú me has dicho...me puso la piel de gallina... parecia estar oyendo a mi padre cuando nos lo repetia,.. desde luego que llevó muchos palos pero también siempre decia... no hay mayor tesoro que el que encuentres en tu corazón y yo de un niño lo perdono todo... hasta que me cagué en la cabeza...perdón por la expresión...
Otro beso de Esther.
Tu poema desgarra el alma Maribel de quien por un instante se pone en tu lugar y siente lo que debes haber padecido en ese calvario de incomprensión que debes haber sentido por no poder entender qué pasaba por la cabeza y en la vida de tu hijo. Pero ya no te tortures más, agradece a Dios por el tiempo que lo tuviste, por lo que con él viviste y los que de él aprendiste. Sus caminos se volverán a cruzar seguro en el más allá y entonces podrán disfrutar juntos todo lo que ahora no pudo ser. Para ganar hay que perder, para que salga el sol, al amanecer, debe primero anochecer. La vida a veces nos parece injusta, pero todo tiene un porqué, una razón de ser. Seguro que verás la luz al final del camino.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande
Maribel te sigue Belkis:
ResponderEliminarDando marcha atras, resulta interesante ver que hay alguien que se ha preocupado de entrar despues para hacer un comentario sabroso y muy autentico.
Yo también he pensado que hay que morir para volver a nacer de nuevo. Y eso es justamente lo que me ha proporcionado una existencia llena de posibilidades para un comienzo distinto de mi vida.
Estoy convencida que no tengo que esperar a ver la luz, porque ya la estoy viendo a traves de todo el milagro de ir conociendo a gente con una sensibilidad tan exquisita, y que es capaz de comprenderme.
Gracias Belkis-
Como veras te estoy persiguiendo por el blog.
Un abrazo, Maribel